El Barça se gusta en su mejor partido de la pretemporada. Neymar, Messi y Rakitic golean; Jordi Alba, sustituido con molestias musculares
El Barcelona no defraudó en su regreso a casa. El técnico Luis Enrique Martínez le dio a la afición lo que quería y frente a la Roma, invitado de honor del trofeo Joan Gamper, alineó de entrada al tridente que forman Messi, Neymar y Suárez. Entre los tres revolucionaron el juego del equipo, que se gustó jugando al primer toque en zonas de peligro durante muchas fases del primer tiempo.
Tras un comienzo arrollador en el que los azulgrana obligaron al portero romanista Szczesny a lucirse hasta en cuatro ocasiones, fue Neymar quien abrió la lata. El brasileño aprovechó la asistencia de Mathieu, en el rol de lateral izquierdo, tras un fantástico desplazamiento en largo de Messi, y estableció el primer gol del partido.
El argentino, omnipresente mientras estuvo sobre el terreno de juego, quiso mojar ante su público y culminó una triangulación con Neymar y Suárez con un disparo seco escorado al palo para poner el 2-0 con el que el choque llegó al descanso.
Ni Luis Enrique ni Rudi Garcia realizaron demasiados cambios tras la reanudación y el partido mantuvo el tono del primer tiempo, con un Barcelona ciertamente impreciso pero con muchas ganas de gustar y una Roma muy paciente pese a no haber sumado ni una sola victoria durante la pretemporada.
Sólo Nainggolan y Destro llegaron a inquietar a Ter-Stegen, que ocupó el marco azulgrana hasta el minuto 15 del segundo tiempo, cuando Luis Enrique cambió prácticamente a todo el equipo, incluido el tridente, y dio entrada, entre otros, a Pedro Rodríguez, que pudo haber vivido su último partido en el Camp Nou como jugador azulgrana. Por si acaso, la afición no dejó de aclamarle cada vez que tocó el balón.
Garcia no tardó en hacer lo propio y cuando el partido corría el partido de dormirse ante tanto cambio, Rakitic lo despertó con un cañonazo desde 25 metros que se transformó en el 3 a 0 en el minuto 65, resultado con el que el Barcelona cerró la pretemporada.
Lo mejor, el ritmo ascendente del equipo, mucho más voraz que en anteriores encuentros con el regreso del tridente, en particular de Messi, y el haber conseguido dejar la puerta a cero por primera vez esta temporada. Lo peor, la lesión de Jordi Alba, que fue sustituido por Halilovic tras notar molestias en el isquio. A partir del martes que viene, en la Supercopa de Europa contra el Sevilla, ya no habrá lugar para experimentos.
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