Un doblete del argentino deja la eliminatoria casi sentenciada en Londres
Lionel Messi. Sin calificativos. Es el hombre. El mejor hoy en día. El argentino por fin pudo anotar ante Petr Cech y, además, en dos ocasiones. El Barcelona no hizo su mejor partido ante un Arsenal que no mereció perder, pero la MSN reapareció cuando más lo necesitaba su equipo para romper la defensa Gunner y lograr un resultado que, casi seguro, les ha otorgado el pase a Cuartos de Final. Oxlade-Chamberlain tuvo que marcharse lesionado tras un choque con Mascherano.
En contra de todo pronóstico y esperanza azulgrana, derrotar al Arsenal no iba a ser nada fácil. Los de Arsène Wenger se plantaron sobre el césped del Emirates Stadium con ganas de mostrar al mundo su calidad y por qué pelean por el liderato de la Premier League. Juntos, sin presiones innecesarias arriba para elevar el agotamiento y salidas vertiginosas. Esa era la clave en busca de conseguir un resultado favorable en casa y optar a los cuartos de final. Sin embargo, la primera parte, gozó de escasas oportunidades. La más clara del Arsenal la tuvo Oxlade-Chamberlain desde el punto de penalti aprovechando un rechace de Mascherano, pero Ter Stegen pudo detener el remate del inglés. La desventaja para el conjunto inglés llegó al final de los primeros 45 minutos. El propio Oxlade tuvo un choque muy duro contra Mascherano en un contragolpe de los Gunners, llegando a jugar los últimos ocho minutos con el centrocampista prácticamente lesionado. Fue además, al filo del descanso, cuando el Barcelona gozó de la oportunidad más clara del partido hasta ese momento. Una llegada de Alves por la derecha sirvió para empalmar de primeras un centro largo de Busquets para queLuis Suárez rematara de cabeza en la frontal del área pequeña, pero su cabezazo se marchó rozando la madera.
La segunda mitad comenzó con varias ocasiones muy claras para ambos. El primero en llegar fue Neymar con una gran jugada por la izquierda hasta adentrarse en el área y plantarse ante Cech, pero el guardameta checo le gana el mano a mano y evita que el Barcelona se pusiera por delante. Acto seguido se tuvo que marchar del terreno de juego Oxlade-Chamberlain. El inglés intentó jugar tras el descanso, pero no aguantó la lesión y fue sustituido por Walcott. La respuesta Gunner llegaría en el minuto 60. Monreal se sacó de la manga un centro magnífico desde la izquierda hacia Giroud, quien remató de cabeza para forzar a Ter Stegen a realizar la parada del encuentro. Tremenda mano del alemán. El gol no tardaría en llegar: diez minutos más tarde. Contraataque magnífico del tridente azulgrana aprovechando un error garrafal de Giroud en ataque –muy gris el francés, restando a su equipo más que sumando-. Neymar se zafó de varios rivales para darle el esférico a Suárez y éste se la devolvió al brasileño, que encaró portería y, al entrar al área, se la cedió a Messi para que pusiera el 0-1. Por fin pudo el argentino batir a Cech, una espinita que tenía clavada el argentino desde hacía varios años.
El Arsenal se veía obligado a salir al ataque y no podía esperar atrás. Eso provocó la ocasión más clara –a excepción del tanto- de la segunda mitad. Suárez aprovechó un pase de Messi dentro del área para colocarse solo en el pico derecho del área pequeña, pero el uruguayo disparó a la madera de forma incomprensible. La pesadilla del Arsenal aún no había acabado. Parece que la maldición de caer continuamente en Octavos de Final iba a seguir rondando sobre sus cabezas. Flamini, que recién había entrado al terreno de juego, cometió un penalti de libro sobre Leo Messi. El argentino se lo pidió y, esta vez, no falló. 0-2 en el marcador y eliminatoria prácticamente encarrilada. Aún Neymar gozaría de una última oportunidad de poner el tercer gol para el equipo culé, pero Cech sacó una mano providencial para evitarlo en el minuto 92’. El equipo de Arsène Wenger, que no merecía perder, se marcha con un resultado adverso muy difícil de remontar en el Camp Nou. El Barcelona cumple con su papel y, salvo hecatombe, estará en el sorteo de los cuartos de final.
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